AROMAS AMARTELADOS

de historias que afilan las madrugadas

lunes, 9 de noviembre de 2009


A la mitad de una filosa madrugada,una mujer murió bajo un árbol de cedro. Un pérfido buitre que por allí volaba con los ojos centelleados por la ráfaga de luz que produce el alma al salir del cuerpo, entró rapaz en el pecho de la mujer adueñandose del templo de carne para coexistir allí.Encarnado en cortesana llegó a palacio, pero al ser vista volando fué acusada de herejía y condenada a la hoguera.

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